domingo, 8 de noviembre de 2015

Haber nacido

 

Buenas tardes amiguitas y amiguitos. Hace tiempo, como siempre, que no me acerco a estas páginas para compartir sensaciones, y las últimas veces están todas ellas marcadas por un denominador común, la despedida.

Hace ya casi tres meses nos dejaba un genio, una de esas personas que uno tiene la sensación de conocer. Uno de esos con los que se empatiza, alcanzando la seguridad de que un café, una copa, una conversación entre risas, sonrisas, miradas cómplices y humo, sería igual que con cualquier otro amigo. Nunca conocí personalmente al genial Daniel Rabinovich, es más, y esta es otra de esas asignaturas pendientes, como diría José Luis Garci, otro grande, que ya no podré aprobar jamás, la de disfrutar de Les Luthiers en directo con él. Jamás, para los que como yo creemos, tenemos la certeza mejor dicho, de que esto es, nada más y nada menos, que otra etapa del camino, es palabra excesivamente gruesa, pero aquí, ahora, o en un futuro próximo, es cierto que no aprobaré.

Muchas veces pensé  que debía acercarme a ver a Les Luthiers en directo, vivir esa experiencia que como otras muchas, se me antojaba fundamental, ahora, sin él, por más que Les Luthiers sigan adelante, en realidad les guste a ellos o no, son inmortales, ya creo, o temo, que no será lo mismo, porque en mi caso, indefectiblemente, le buscaría y no podría encontrarlo.

Es cierto que me encontraría con Carlitos, el inigualable Carlos Núñez Cortés, con el no menos genial Carlos López Puccio. Con el siempre joven y virtuosísimo Jorge Maronna y con la que para nosotros es la voz, casi me atrevería a decir el que sería, o podría ser, narrador de nuestras vidas, el locutor de los cielos Marcos Mundstock.

Poder ver, aunque sea a través de video, youtube,  DVD, etc, “La hija de Escipión”, el “biólogo de Esther Píscore”, la presentación mal leída donde se refería al “fracaso de su operasión. El fracaso de su ópera, Sión  y el judío era antes”, perdón “Sión y el judío errante” que versaba sobre una “vieja leyendo ebria”, “una vieja leyenda hebrea”, donde se describían “los sexos, dos. Los dos sexos. LOS ÉXODOS, de dicho pueblo”  de Mastropiero. Por no hablar del “Aria agraria” mano a mano con Jorge Marona. La maravillosa “Dilema de amor” de Mastropiero, esa que compuso por un equívoco. Le encomendaron la composición de una obertura académica para la cátedra de epistemología de la SORBONA. Y el entendió “una obra para las HORMONAS”, y en lugar de una obertura académica, compuso una cumbia.

Hay muchas ocasiones en que me digo a mi mismo y en ocasiones le digo a los demás, que hay momentos, lugares, circunstancias que hacen que uno piense en la suerte que tiene al haber nacido y haber sido partícipe de algo. Una puesta de sol, observar la carrera de un perro, la mirada de una mujer, una lectura, algo que se escribe, se ve o se escucha….una conversación….

Escuchar, como hago ahora mismo, el concierto para piano de Gershwin, que podría ser el concierto nº 5 para piano de Beethoven, el aria de la Reina de la Noche de la Flauta Mágica de Mozart, una puesta de sol en Menorca, ver la Alhambra de noche, hacer “epistemología” o escuchar, ver, disfrutar, reír, asombrarse y volver a reírse, una y otra vez, al contemplar un espectáculo completo o un fragmento de una obra de Les Luthiers, con el ya mítico Daniel Rabinovich, son cosas que me hacen dar gracias a Dios por haber nacido y tener la oportunidad de  vivir esos momentos.

Solo me gustaría decir, a todos los Luthiers y a Daniel en particular, gracias, de todo corazón gracias. Un beso para ti, Neneco,  allá, bien allá, donde estarás liado, imagino, recordándole la “payada de la vaca” a alguien que yo me sé.

Bss

domingo, 5 de julio de 2015

Para tí


 

Hola mi vida, son las 5.36 de la madrugada del 4 al 5 de Julio de 2015. Hoy ya es el cumpleaños de Kenu. Se que para ti como para mí, aunque en menor medida, hoy todo queda eclipsado por la chiquitusa. En verdad te digo que nunca, nunca, pensé que una cosita tan pequeña pudiese dejar un vacío tan grande. Que alguien tan callado pudiese generar tanto ruido. Que su silencio, en su ausencia, pudiese llegar a ser tan estruendoso.

Todo lo que hemos hecho, todo lo que fundamentalmente has hecho tú desde aquel 29 de Julio de 2012, primero por Kenu, luego por Flaky, y simultáneamente por los dos, te califica como madre, como mujer y como persona. Todo eso, la paciencia, la abnegación, la entrega, la dedicación, el amor incondicional, la devoción, no es sino lo que le he visto hacer a mi madre conmigo y con mi hermano. No dudo de que todas las madres sean más o menos así con sus cachorros, pero si puedo decir, con absoluta seguridad y certeza, que siendo todas de esa manera algunas lo sois más, algunas lo sois con mayúsculas, negrita y subrayado.

Todo eso me hace convencerme de que no me equivoqué contigo, que al dejarme formar parte de tu vida he tenido mucha suerte, ya que eso me ha permitido recibir lecciones que deberían constar con tinta indeleble en los anales de lo que debería ser una persona ejemplar y completa.

Todos tenemos defectos, sin duda. Tú los tienes,  yo los tengo, y Kenu y Flaky, pero es cierto que ellos, nuestros hijos, al margen de que por su condición reciban un cierto trato preferente tienen algo que también les hace únicos, especiales. Solo he visto esas cualidades de las que hablaba antes, y que compartís mi madre y tú, en otros seres, en ellos.

Me acuerdo del 29 de Julio de 2012. Recuerdo como salimos a esperarlos a la esquina de Marcelo Usera, y de la impresión que me causó ver a Kenu tumbado en el asiento de atrás. Me pareció más grande, mucho más delgado y muchísimo más guapo que en las fotos que nos habían enviado. Recuerdo su primera salida, la sensación de pensar que aquella aventura iba a resultar mucho más complicada de lo que parecía. Los primeros días. Aquella vez que se puso a ladrar a la televisión y te asustaste tanto. El miedo que sentía cuando se acercaba un coche. La imposibilidad de acercarse a un cubo de basura…Recuerdo también las primeras risas, sus primeras vacaciones en la playa, los primeros motes, pecho vaca, huevos planos, to-lo-meo, to-lo-huelo…

Han pasado casi 3 años de todo aquello. Todo ha cambiado mucho, él y nosotros. Nos hemos acostumbrado a cada gesto, a cada detalle, a sus nervios, a su glotonería, a su amor…Tanto, que quizá no le valoremos tanto como al principio.

Tiempo después llegó Flaky, tu chiquitusa, la pequegña, pequegña. Nuestra hijita de amó. Y todo cambió una vez más. Para ti, porque ella representaba mucho más que una perrita, que una hijita fiel y amante. Flaky es tu deseo de tener una hijita. El reflejo de las ganas tremendas de adoptar a Bonsai, algo que quisimos paliar con Dana y que, lamentable o afortunadamente, no funcionó. El deseo de que Kenu no estuviese solo. De formar una pequeña comunidad de gordos perrunillos que nos recibiese, todos a la vez, al volver a casa. Y que esa comunidad se convirtiese en una familia feliz.

Pero, ay hijita, resultó que la lucha con Flaky se nos fue de las manos. Primero había que recuperarla. Mayorcita, desnutrida, agotada…Era preciso lograr que mejorase y mucho. Y lo conseguiste. Simultáneamente se presentaba el problema de su relación con Kenu. Ver como se adaptarían, si existiría una relación afable o de cierta tensión por ver quien era el dominante. Y siempre, como un fantasma maligno, sobrevolaba la idea de que aunque había mejorado espectacularmente seguía teniendo problemas.

Pero claro, cuando algo está predestinado, cuando los astros parecen alinearse en una mágica conjunción, las cosas discurrieron como cabía esperar. Flaky ha demostrado ser como tú. Debía haber muerto aquel verano de 2014, agotada, hambrienta y sola, pero no, al igual que su mami, fuerte, decidida, inquebrantable, sobrevivió para encontrarse con su alma gemela. Se recuperó para encontrar una relación especial y única con alguien que era como ella. Con su presencia silenciosa y permanente se ganó a su hermano, amigo y compañero. Con su mirada y sus gestos, sin necesidad de alzar la voz, tiene a su padre austero y adusto derramando lágrimas al evocar su recuerdo. Y creó un vínculo único e indestructible con la única persona en el mundo con la que podía crearlo, contigo.

He repetido muchas veces aquella frase de mi admirado Cayo Julio César: “no hay nada tan fuerte que la voluntad no pueda vencer”, y he añadido, seguramente desde la muerte de mi padre, que si hay una cosa que la más firme voluntad no puede derrotar es la muerte. Pero ahora, parafraseándole, debo decir que hay cosas, algunas pocas cosas, que la muerte no puede destruir y una de ellas es esa clase de vínculo que entre vosotras dos tejisteis.

Sé que ahora, por un tiempo, que espero sea muy largo, no la puedes ver, no puedes besarla, no puedes ver como te sigue con la mirada, pendiente de cada señal en ti. Sé que es tentador aferrarse con desesperación a cada una de sus cosas. Pero estoy convencido de que la parte fundamental de Flaky no se ha quedado en sus cosas. Cosas que atesoraremos toda la vida, por otra parte. La parte fundamental de Flaky era como era ella y el efecto que provocaba en ti. Y, y esto es significativo, como eres tú y el efecto que provocabas en ella. Sin ti, Flaky nunca hubiese sido como fue. Sin ella, tú, ahora, no serías como eres en este momento. Ese vínculo irrepetible, está en ti, Flaky está en ti.

La vida es una aventura ideal, observada desde la lejanía de una vista aérea documental. A ras de suelo es implacable. No sé cual era el nombre de Flaky. No sé cuando nació. No sé que clase de vida llevó. Pero a poco que lo piense solo puedo llegar a una conclusión. Nació el 13 de Julio de 2014, entre las dos y las tres de la tarde. Se llamaba Flaky. Vivió una vida feliz. Fue de vacaciones muchas veces, sobre todo a la playa. Disfrutaba enormemente en la casa de campo, venteando, levantando liebres y conejos. Y encontró un amor único y sin medida en su madre.

Alguien, ahí arriba, encargado de la gestión de recursos humanos, decidió, con criterio irreprochable, que toda la preparación, tras largos años, había culminado, gracias a ese encuentro casual, en un resultado definitivo e inapreciable. Flaky estaba preparada para asumir mayores responsabilidades. Para jugar su verdadero papel. Hemos tenido el privilegio de disfrutar de ella. Y nuestra hijita nos ha impregnado de su esencia, de su amor, de sus virtudes. A mí, a Kenu, pero sobre todo y de manera muy especial a su adorada mami, a ti.

Ahora llorar y echarla de menos no sirve para expresar lo que sentimos en realidad. La buscaremos cada día, todos los días, el resto de nuestra vida y no la encontraremos, hasta que nosotros, mucho más humildes y normales, podamos volver a reunirnos con ella. Y la buscaremos y la buscaremos mal. Porque si quiero ver a Flaky, más allá de sus fotos, solo tengo que mirar a Kenu. Si quiero abrazarla, solo tengo que arrodillarme y estrechar la cabeza de Kenu entre mis manos. Si quiero darle un beso, si quiero sentir su amor, solo tengo que besarte a ti, y sentir el amor que nos das. Porque ese amor, que ya no es solo tuyo, es el que nos has dado a nosotros, y es el que has recibido de ella. Ella está en ti. Y ahí, acurrucada dentro de ti estará, en préstamo, hasta que un día, dentro de muchos años, la veas correr otra vez hacia ti y, por fin, se cierre el círculo.

Os amo.

viernes, 3 de julio de 2015

Flaky


Hola pequeña, hace nada te daba unos besos y me despedía de ti. Pensaba bajar hoy a verte, pero no ha habido ocasión. Ahora, cuando cierro los ojos, aún cuando los tengo abiertos, solo veo tus ojazos redonditos. Supongo que siempre has llamado más la atención por contraste. No te enfades conmigo, no siempre se puede destacar. Siempre hay alguien más guapo, más listo, más fuerte, más alto…Créeme pequeñita, aunque sea por contraste, es bueno quedarse en la memoria.

Ya sabes como es Kenu. Siempre tan nervioso, sin parar de moverse, dándote con el rabo en la cara, y tu, teniendo que cerrar los ojitos para evitar los golpetazos. Ese contraste hace que destaques, que  te fijes en el recuerdo. Siempre tan buena, tan tranquilita, tan callada. Bueno, también a ti puedo ponerte algún que otro pero. Recuerdas el verano pasado cuando estabas con el celo y entró aquella perrita en el jardín? Era la primera vez que te oía ladrar. O aquel día, hace poco, que tan nerviosilla por salir le mordiste a Eva en el pie?

Hoy, al salir de casa para ir a trabajar, había una luna llena preciosa, redonda, como tus ojos, y me he acordado del pasado verano, recuerdas cuando salíamos por la noche y la única luz era la de la luna?

Al volver a casa, pensando en ti, miraba tu amada casa de campo. ¡Como te echamos de menos!, si, ella también. Que buena pareja, Kenu y tú, si hubiésemos sido cazadores. No te preocupes mi vida, que volverás a ir a la Casa de Campo.

Ahora se que probablemente estarás confundida, con miedillo, como cuando se te acercaba un perro grandote por la calle, pero debes estar tranquilita mi amor. Ese perro mucho más grande que tu, blanco, con manchas marrones, si,  ese tan guapo, es Mambo. Te acuerdas la cantidad de veces que te he dicho que Mambo era aún más guapo que Kenu? Sé que nos echas de menos y que te sientes rara. Sé que lo que más te gustaría sería estar con Eva, tu mami, y poder tumbarte al lado de Kenu, pero ahora debes ser paciente. Qué te puedo enseñar yo acerca de la paciencia?

Con Mambo estarás bien, el te enseñará todo y jugará contigo. Podrás olisquear tanto como quieras, podrás volver a correr libremente, sin la pesadez de la Flexi, sin arnés, como aquel primer día en la Casa de Campo, te acuerdas? ¡Vaya susto nos diste¡ Pensábamos que no pararías de correr hasta recorrer toda la casa de campo.

Quería escribirte todo esto para decirte que me he equivocado muchas veces contigo. Recuerdas haberme oído decir que Kenu era la mejor persona de la familia? Estaba equivocado, tú eres la mejor persona de la familia. Es increíble que siendo tan pequeñita, tan callada, hayas causado tanto ruido, tanto impacto en nosotros. También pensé que cuando me tocase separarme de ti sería menos doloroso que cuando me toque hacerlo de Kenu. También estaba equivocado.

Solo quiero que sepas que ahora, tarde como suele ocurrirme, he comprendido que te he querido muchísimo, que te quiero muchísimo. Recuérdalo cuando nos volvamos a ver pequeña.

Y te lo repito, tienes que tener paciencia mi amor, se que echas de menos a tu mami, pero ella, mi vida, te echa mucho más de menos a ti.

 

Te quiero y te querré siempre chiquitusa.

lunes, 1 de junio de 2015

No me toques el pito


Buenas tardes amiguitas y amiguitos, quiero comenzar avisando a navegantes, este será, D.M., el post mas políticamente incorrecto de los que he escrito hasta ahora. No he empezado, en todo caso, como debería si me ciño a lo anteriormente mencionado. Y he empezado mal por el mismo título de inicio, en realidad debería titularse NO ME TOQUÉIS LA POLLA.

He de continuar manifestando que, como buen español, no me siento especialmente orgulloso de mi país, y digo mío y digo bien. He nacido aquí, tengo esta nacionalidad y llevo casi 25 años de mi vida contribuyendo a su sostenimiento a través de los impuestos que me toca pagar. Debo puntualizar que mi “lealtad” a mi país, que se manifiesta en mi declaración de Renta anual, por ejemplo, y a sus símbolos, bandera e himno, serían los mismos si dicha bandera fuese roja, amarilla y morada y el himno fuese el de Riego, que por cierto tiene letra.

No entiendo , y he desistido de entender, porque razón aquí se vituperan dichos símbolos mientras en cualquier otro lugar se tiene a gala la pertenencia a una determinada nación, con independencia del brillo, esplendor o situación de la misma. Decía que no me siento orgulloso de tener la misma nacionalidad, o de haber nacido en la misma mala madrastra que Séneca, Don Pelayo, Rodrigo Díaz de Vivar, Averroes, Elcano, Cervantes, Quevedo, Lope, Tirso, Calderón, Blas de Lezo, Mazarredo, Lorca, Falla, Blasco Ibáñez, Unamuno, Ortega y Gasset, Ramón y Cajal, Juan Oró, Miguel Indurain, o Don Rafael Nadal Parera, por hacer una brevísima e incompleta enumeración.

Lo que me indigna, lo que me saca absolutamente de mis casillas es la impunidad y la injusticia, la falta de equidad, de educación y de respeto. Supongamos que unos colegones y yo mismo, haciendo gala de profunda educación, clase y estilo, arrancamos una señera, senyera o como el diablo la denomine, la arrastramos por el suelo, orinamos encima y, finalmente, le prendemos fuego. O una ikurriña, que para el caso es lo mismo. Qué dirían de nosotros? Que dirían de mí, si en momento más o menos solemne aprovecho que está sonando “Els segadors” para rascarme con fruición la entrepierna, que digo entrepierna, la polla señores, y además aprovecho para eructar sonoramente, sacarme un moco, cagarme en su puta madre o, simplemente, silbar o chillar como un poseso?

La tan manida superioridad moral de la supuesta izquierda nos advierte de que es signo de mucha prudencia democrática el respeto a la libertad de expresión, aprovechando, de soslayo, para manifestar, con el complejo de superioridad que les es propio, que el origen del problema no está en que se pisoteen los símbolos de mí país, y el suyo por desgracia, sino en que es el estado español el que genera dicha repulsa.

Miren ustedes, si tuviesen cojones, de los que carecen, lo que harían, después de clasificarse para disputar una final de la Copa del Rey, es sacar una nota pública manifestando que estando en profundo desacuerdo con lo que España representa y significa, se niegan a jugar dicha final. Es más, que no van a participar más en ninguna competición organizada desde y por un estado manifiestamente opresor y totalitario como el estado español.

Me rindo. Me la pela, absolutamente, lo que hagan o digan. Me la trae floja y pendulante que piten en himno de mi país. Me la suda, que pisen mi bandera. Eso sí, luego, no me pidan en navidad que compre cava catalán. No me soliciten que adquiera productos textiles catalanes o que visite Euskadi. Como si no existieran, como si hubiesen muerto. Ya lo he dicho en alguna ocasión, mil veces que nacieran, ada colau o artur más, no serían la mitad de independentistas de lo que soy yo. Váyanse de una puta vez, o mejor aún, échenlos. A la puta calle, a la puta mierda. Cojan su bandera de mierda, su himno de paletos, su virgen negra en miniatura, su puto equipo de futbol pagado por Qatar y lárguense a Zurich que es su verdadera patria, o, al menos, donde tienen nuestro dinero. Eso si, por favor, NO ME TOQUEN MAS LA POLLA.

 

Bss.

miércoles, 20 de mayo de 2015

Prometer hasta meter..


Buenas tardes amiguitas y amiguitos. Faltan menos de 4 días para el magno acontecimiento, fiesta de la democracia, orgía de libertad…no se porque extraña razón todo me conduce al flanco más sátiro, lujurioso y erótico del acontecimiento. Hay un viejo adagio que reza: “prometer hasta meter, y después de haber metido, no hay nada de lo prometido”. Y me parece, en mi calenturienta imaginación, que se manifiesta con absoluta claridad, que viene al pelo, al referirnos a una jornada de “erecciones”, municipales y autonómicas.

Sé que hay algunos y algunas que lleváis tiempo barruntando, jamás me atrevería a pensar que apostando, hacia donde se dirigirán mis tiros electorales. Quiero aprovechar estas líneas para, en primer lugar, no dejar títere con cabeza. Soy persona mucho más razonable de lo que aparento. Mi lugar favorito a ocupar en cualquier tertulia o diálogo sobre política es el reservado al abogado del diablo. Tiendo a meterme con los populares, cuando entre sus votantes me encuentro, y con el pse, perdón psoe, cuando frecuento a sus simpatizantes o simpatizantas. Es cierto que me resulta mucho más complicado atizarle al soe, o como tengan a bien denominarlo, ya que he comprobado que, con carácter general, sus simpatizantes  y simpatizantas muerden y arañan, y eso duele, como decía la Bombi.

Antes de nada, y por sentar unos principios básicos, la fiesta de la democracia es, exclusivamente, suya. Es día festivo puesto que garantiza un puesto de trabajo sin ninguna responsabilidad. Búsquenme un cargo público que haya sido responsable de algo alguna vez, que reconozca haber introducido alguno de sus apéndices o extremidades tan profundamente que haya sido vislumbrado en Nueva Zelanda y que, consecuentemente, haciendo gala de honradez, seriedad y bonhomía, pliegue faldones y velas y se retire de la vida pública. Y con unos emolumentos próximos a los de un futbolista profesional, because i´m worth it.

En segundo lugar me parece, esta es otra opinión propia y a lo que parece nada extendida, que la legislación vigente debería encargarse de que toda organización implicada en casos de corrupción tuviese vetada no ya la obtención de  cargos de gestión de la cosa pública, sino tan siquiera la posibilidad de concurrir al juego electoral, al menos en tanto en cuanto no quedasen debidamente redimidas todas sus actuaciones  fraudulentas.

En tercer lugar tengo una pésima noticia para aquellos o aquellas que de buena, o mala fe, crean que la autodenominada izquierda tiene el patrimonio de la verdad, de la lucha a favor de los más desfavorecidos y de la defensa de los intereses de todos. Para lo que, en mi modesta opinión, ha perpetrado el pse, perdón psoe, en su labor de gobierno como de oposición, solo hay una palabra, TRAICIÓN, pero háganme el favor de escribirlo en calibrí, negrita, subrayado y a tamaño 2.000.000. No se puede representar a tantos, arrogarse, como era lógico y deseable, la representación de los trabajadores y trabajadoras y emplear toda aquella ilusión, toda aquella energía y destinarla a movilizar los centenares, miles, de camiones  de 18  ruedas abarrotados, hasta los topes, de nuestro dinero. Un hijo de la gran puta, lo es, hijo de puta digo, con independencia de que sea su hijo de puta, o incluso su hijo de puta favorito.  La izquierda de este país es la de: filesa, malesa, time export, gal, boe, roldán, gasolineras, antena 3 radio, psv, cursos de formación, y ere que ere. Podéis deducir a quién no votaré nunca más?

Del desgobierno del sin par Mariano no voy a hablar más. Es el desgobierno que ha entroncado perfectamente con el del hijo del viento. El de dije digo y digo Diego. El de gurtel, el del Madrid arena…parecía imposible que hubiese otro igual o más imbécil. No querías caldo, dos tazas.

Izquierda hundida, por la izquierda, por podemos, es cómplice de los gobiernos andaluces del ere que ere. Se ha descompuesto como un azucarillo en medio de la vorágine del viento que mece coletas. Sueños húmedos cuasi adolescentes, quien no soñó con transmutar la sociedad haciendo de este mundo un lugar justo, sostenible, y libre?. Luego viene la stasi y te despierta del sueño a hostias, y claro, no te queda cara de tonto melancólico porque te la han borrado con la porra.

Podemos, pero qué podemos ser y qué queremos ser? Podemos ser Venezuela, sin duda, o Burundi. El problema es que yo quiero ser Noruega, y eso resulta más complicado, mucho más. Yo casi era rubio, castaño claro, casi tenía los ojos verdes, cuando se mojaban lo parecían, casi llegué a alcanzar el 1.85 de altura, pero me equivoqué de deporte y empecé a fumar joven. Estuve cerca, pero no lo suficiente. Ser Noruega es bastante más difícil que ser Venezuela, me parece, y no me creo que un tío que parece de Albacete, con todos mis respetos para la tierra manchega, me vaya a conducir a vivir en Oslo. Bueno, si gobierna probablemente sí.

Ciudadanos somos todos, pero unos más que otros. Sencillamente me han maltratado tanto en tan diferentes concesionarios de automóviles que cuando aparece un vendedor de magnífico aspecto, de irreprochable actitud, de pétreo sentido común y de indudable capacidad de convicción simplemente tiendo a  pensar que es imposible que el coche funcione. Llamadme mal pensado, probablemente lo sea, ya se sabe, pagan justos por pecadores. 

UpyD que fue mi gran ilusión, el único partido que se presentaba como acusación en todos los casos de corrupción, que venía a remover conciencias, a repartir estopa a pp y pse, perdón, psoe, se ha, eso, partido. Fumigados por el abrazo del oso ciudadano. Quedando mal sin necesidad. Forzados por supuestos amigos a un pacto “ciudadano”, aunque no fueran lo mismo. Y sustraído del cariño popular por el excesivo protagonismo de su lideresa. Claro, porque los demás, los otros actores y actoras del drama electoral no tienen ningún afán protagónico.

En fin, que me queda? Simplemente me viene a la memoria cuando escucho promesas y promesas, parole e parole e parole, aquella frase rescatada de mi memoria por el recientemente fallecido Jesús Hermida, vaya desde aquí mi recuerdo para él. Comentaba el caso de dos jóvenes, jóvenas en este caso. Una de ellas con mirada lánguida y triste le comentaba a su amiga: “El tío no solo me engañó sobre el tamaño del yate, sino que, encima, me hizo remar”.

 

Bss

sábado, 18 de abril de 2015

Malos "ratos"


Buenos días amiguitas y amiguitos. Tras una semana convulsa, el gran bombazo informativo saltaba con el registro del domicilio y despacho de Rodrigo Rato, ex vicepresidente y hombre fuerte de los des-gobiernos de Aznar. Sociedades interpuestas, evasión fiscal, un entramado societario que, en definitiva, pone una vez más en tela de juicio la labor de los auto denominados servidores públicos. Semana esta en la que también han continuado las comparecencias ante el Tribunal Supremo de los imputados, investigados, o como se quieran denominar, por el caso de los ere que ere de anda-lucía. 1.300 millones de euros parece que tienen la culpa. Doy este dato porque al susodicho Rato se le calcula un patrimonio personal de 27 millones de euros, lo digo para que centremos un pelín el debate y las iras.

Esta semana también se ha hecho público el dato de que el 40% de los altos cargos socio-listos y el 30% de los altos cargos pop-ulares nunca, jamás de los jamases, never, never, never, ha hecho otra cosa que dedicarse al “servicio público”, según un informe elaborado por la plataforma epolitic, que apostilla, como si fuese necesario, que el 70% de los cargos públicos jamás ha trabajado en el sector privado. Dicho así por ellos y ellas, “tengo vocación de servicio público”, suena al ejercicio de la profesión más antigua del mundo y, efectivamente así es, solo que nosotros pagamos la coima y ponemos la cama.

Es decir, y resumiendo, que tenemos políticos profesionales que llegan a ocupar altos cargos de gestión sin ninguna experiencia profesional, en muchos casos con unos currículos manifiestamente mejorables, véase el caso del nuevo presidente del parlamento andaluz que no posee estudios universitarios, y que, mira tú por donde, terminan en no pocas ocasiones no ya salpicados, sino hundidos hasta la gola en todo tipo de corruptelas. Eso sí, dato este a tener muy en cuenta a mi modesto entender, esa experiencia necesaria exigida para el común de los mortales se adquiere, finalmente, en la empresa privada, concretamente en consejos de administración de las más grandes y selectas corporaciones. Claro está que en ese punto resulta absolutamente innecesaria puesto que nuestros estimados y estimadas próceres y próceras ya van de retirá, como diría el otro.

Habrá alguno o alguna de vosotros y vosotras que se encuentre en aparente desacuerdo conmigo, manifestando que no es condición necesaria la formación académica para el ejercicio de la gestión pública. Y yo, tras considerarlo muy por lo menudo, os doy la razón y aprovecho el guante lanzado para formular una pregunta: pude realizar una intervención quirúrgica una persona que posea 30 años de experiencia en quirófanos y que no haya obtenido su doctorado en medicina? Y si puede, por qué a cualquier trabajador o trabajadora se le exige no ya esa experiencia sino, además, una formación lo más completa posible incluyendo grados, posgrados, masters del universo, etc…?

Es decir que los padres y madres de la patria y patrio, de monipodio insisto, pueden acceder a un cargo de evidente responsabilidad sin formación y/o sin experiencia pero cualquiera de nosotros no. Si demuestran su más que evidente capacidad para la gestión de patrimonios, los suyos y los de los allegados, creando entramados societarios, evadiendo impuestos, robando, etc…son citados, investigados o imputados por el Tribunal Supremo, pero nosotros no. Cuando tras una gestión, las más de las veces manifiestamente mejorable, y decididos a retirarse de la vida pública, pasan a engrosar las filas de consejos de administración de empresas todopoderosas, con emolumentos acordes a su nivel, capacitación y profesionalidad, pero nosotros no. Si, además, con el pelo ya blanco y tras deleitosa carrera, se transmutan en una suerte de Petronios, árbitros no ya de la elegancia sino de la conciencia, manifestando en singulares mayestáticos opiniones tenidas permanentemente en cuenta y acompañadas de un coro susurrante de reflexivos gariteros, que hacen razón de lo muy sesudo y oportuno de sus opiniones, manifestando lo conveniente que para todos es tenerlos como referencia, pero a nosotros no..entonces, ¿qué nos queda?, ¿qué podemos hacer?

No me digáis, amiguitos y amiguitas, que nada. No me dejéis con la sensación de que la apatía y el abatimiento, el encogerse de hombros y seguir caminando, es la única opción que nos queda. Estoy absolutamente convencido de que el sistema está diseñado para su propia supervivencia, desechando cualquier posibilidad de cambio desde fuera, y que los partidos políticos son meros instrumentos para encauzar los sentimientos de participación y que el arroyo no se desborde. Por esa razón siento ese profundo deseo de castigar “con gran venganza y furiosa cólera” a todos aquellos y aquellas a los que observo defender con uñas y dientes a esos que solo pretenden preservar un sistema creado para entretener al pueblo, para sojuzgar al pueblo, pero sin contar jamás con el pueblo. Esa gran venganza y furiosa cólera representadas por una cita electoral que se saldase con un 5% de participación, con un fracaso rotundo de su rotunda mentira.

Podemos, y me refiero a la primera persona del plural del presente de indicativo del verbo poder, hacer cosas. Podemos no votar a ningún partido político salpicado por el mínimo caso de corrupción. Podemos no acudir a mitin o manifestación electoral alguna.   Podemos votar en blanco o abstenernos de participar en el tinglado electoral de turno si no hay nadie que nos convenza. Y podemos correr la voz, susurrando si queréis, de que estamos hartos, ahítos, cansados, de sus “malos Ratos”.

 

Bss

 

domingo, 5 de abril de 2015

INSOSTENIBLE

Buenos días amiguitas y amiguitos. La verdad es que hoy, Domingo de Resurrección, día de celebración para muchos, de asueto para aún  más, y de vacaciones para unos cuantos, no sería, en principio, día idóneo para filosofar sobre cuestiones  graves, incómodas y desasosegantes. Ayer escuchaba en un programa de radio otra reflexión, muy del gusto de los liberales, a cerca de lo insostenible del sistema público de pensiones. En un país, patio de monipodio y cuna de notabilísimas y excelsas excepciones como este, en el que el carpe diem, la desinformación, el mirar para otro lado, la permanente pose optimista y, en el fondo, el Dios proveerá, el sustento futuro tiende a dejarse de lado. También, es algo obvio, la cruda e implacable realidad nos ha impedido, a un número no pequeño, la posibilidad de pensar a largo o muy largo plazo, obligándonos a vivir al día, sin posibilidad real de presupuestar sobre los garbanzos futuros cuando los presentes se manifiestan menguados, cuando no inexistentes.

He observado, como todos vosotros, que las cuestiones de la economía doméstica se tienen perfectamente estudiadas y muy a gala, haciendo incluso pública ostentación de lo bien que gestiona cada mochuelo su propio olivo. Sin embargo, cuando de cuestiones de contabilidad pública se trata desaparece ese sentido común, ese frío análisis y esa capacitación, cuasi doctoral, de gestionar los recursos. Nos inquieta, cuando no ofende, que el mínimo menoscabo de la cosa pública se presente como instrumento eficaz de gestión, o medio necesario, para la prestación de servicios. 

Las pensiones, la ayuda a la dependencia, los hospitales públicos, la atención primaria, etc…, descansan en un sistema que es, digámoslo claro, alto y de una vez, INSOSTENIBLE. Me gusta esa situación? Evidentemente no. Es deseable? Evidentemente no. Es evitable? Probablemente no.

Pensad, por un momento, en vuestra economía doméstica. Un ejemplo: una persona o persono, que vive sola o solo, ingresa por su trabajo 1.000 € mensuales, un privilegiado, quien nos lo iba a decir. Supongamos que debe afrontar los siguientes gastos mensuales: Alquiler, 400€. Luz 25€. Gas 25€. Manutención 300€. Transporte 55€. Móvil 30€. Internet 30€.Agua 15€. Ese total de gastos, 880€, dejan un saldo de 120 Euros mensuales. El ejemplo carece de coche, seguro médico, dental, no invierte un solo euro mensual en vestimenta y/o aderezo y, por supuesto, no dedica nada al ocio, léase cine, teatro, literatura, masajes, viajes, etc. No entrega cantidad alguna a ONG´s. No destina parte alguna de su renta a agasajar a su madre/padre, muchacha o muchacho alguna o alguno. Y, por descontado, no fuma.  Pero, y si lo hiciera? Y si contratase un seguro médico por 40€ mensuales? Y si paga 50€ de letra de coche?, que a fe mía sé que es muy barato, si las letras de un coche fuesen de 50€, al tener 5 letras la palabra, el coche costaría 250€, o no? Y si contratara un servicio mensual en el gimnasio “El michelín Feroz” por 30€? Y si destina 100€ a ocio, nocturno o diurno? Sus gastos ascenderían a 1.100€ mensuales. Se pasa. Conclusión? No gasta. Ni seguro médico, ni gimnasio, ni coche, ni ocio, ni, ni, ni…

Y en lo público? En lo público sí hay que gastar? Y cómo proceder, si los gastos superan a los ingresos? Ahh, me parece escuchar a alguien al fondo de la sala, la deuda pública, la financiación del sector público, los impuestos. Y, digo yo, un particular, como el del ejemplo, también podría solicitar a su banco un préstamo, o dos, o tres, pero al final, que ocurriría? El banco dejaría de prestarle ante su imposibilidad de devolver lo prestado.

 La deuda pública, letras del tesoro, bonos del estado, etc., es adquirida por aquellos que ante un exceso de tesorería y buscando una forma de inversión sin riesgo prestan dinero al estado con la seguridad de recuperar su inversión y obtener una pequeña rentabilidad. Los impuestos se obtienen de las detracciones de las rentas de los individuos, los directos, y del gravamen de una manifestación de la capacidad económica, los indirectos. El estado puede también financiarse a través de alguna otra vía. No obstante, al final, ese dinero para el gasto público procede también de nuestros menguados recursos. Y si el estado demuestra una incapacidad para hacer frente a sus obligaciones de pago los inversores que compran deuda pública dejarán de adquirirla.

Al favorecer un sistema de más competitividad y productividad mediante reducción de costes las nóminas son menores, los impuestos directos recaudados son menores, las cotizaciones son menores. Al prolongarse la esperanza de vida el número de perceptores de pensiones se incrementa. El número de personas en situación de dependencia crece. Estamos volviendo a un sistema en el que se prima la contratación de mano de obra cuasi esclava, becarios, trabajadores en formación, etc.. en aras a reducir los costes salariales y mejorar, por tanto, la competitividad. Pero si te expulsan del mercado laboral con 50 años para contratar a personas de 25, sin experiencia en ese momento pero a un coste menor, como vas a poder jubilarte a los 70 años? Y cómo vas a vivir de los 50 a los 70?

Estamos ante las primeras manifestaciones de un mundo estilo “Fuga de Logan”, en el que a los 35 años te jubilen, por cremación o similar, para de esta forma hacer sostenible el sistema? No hay soluciones fáciles para los problemas sencillos. Pero sí tengo clara una cosa. Cuando escucho, leo, o veo, cómo algunos privilegiados del mundo de la cultura, en su ignorancia, o lo que es aún peor, mintiendo, luchando por unas ayudas que no necesitan, claman al cielo, rompen sus vestiduras y ponen pies en pared, exclamando que el porno paga menos IVA que el teatro. (Aclaración: lo que paga es el soporte, EL SOPORTE, las revistas porno pagan el 4%, igual que los periódicos. Las películas porno pagan el 21%, igual que las de Almodóvar). Cuando observo mareas verdes, blancas, negras, amarillas, sin duda muchas de ellas cargadas de razón en su fondo. Cuando escucho como se exige la prestación de unos servicios públicos universales, gratuitos y de la máxima calidad siempre me pregunto, y creo modestamente que todos deberíamos hacerlo, y cómo lo pagamos?

Por qué no tenemos el mismo rigor al analizar la economía pública que la privada o propia de cada uno o una? Será porque como nos aclaró Carmen Calvo, ex ministra de cultura de Zapatero, “el dinero público no es de nadie.”

Bss



P.D.: Este es un espacio de reflexión e INTERCAMBIO de ideas. No puedo hablar con cada uno y una de vosotros y vosotras ni la mitad de lo que me gustaría. Y lo que me gustaría es menos de la mitad de lo que la mitad merecéis (ya me entendéis). Así que, por favor, agradecería poder leer vuestras opiniones. Pido, y si no es bastante, humildemente, ruego, que escribáis. Muchas, muchas gracias tessssooooros.